Proteger su salud mental es un aspecto importante para mantener su salud general, especialmente cuando está ocupado y siente que no tiene tiempo para sí mismo.
La Asociación Americana de Psicología ha investigado la relación entre el estrés, la salud mental y el bienestar físico, descubriendo que muchas personas no entienden el daño del estrés, la ansiedad, la depresión u otras preocupaciones sobre la salud mental hasta que comienzan a tener un impacto en la salud física de la persona.
Este mes, empecemos a priorizar la salud mental con estrategias basadas en la ciencia. Aquí hay siete pasos que puede seguir:
1. Establecer objetivos pequeños: A veces, el tamaño de los objetivos a largo plazo puede resultar abrumador, lo que provoca estrés y ansiedad. En su lugar, desglose sus objetivos en tareas más pequeñas y manejables. Las investigaciones sugieren que alcanzar estos objetivos pequeños puede aumentar los niveles de dopamina, promoviendo una sensación de logro y motivación.
2. Priorizar el ejercicio: El vínculo entre la actividad física y la salud mental está bien establecido. El ejercicio regular libera endorfinas, reduce los niveles de cortisol y mejora el estado de ánimo general. Ya sea un paseo rápido, una sesión de yoga o un entrenamiento en el gimnasio, priorizar la actividad física puede mejorar significativamente el bienestar mental.
3. Obtenga ayuda y no compare: Los desafíos de salud mental varían en intensidad, pero buscar apoyo cuando es necesario es importante, sin importar lo grave que pueda parecer la situación a los demás. Tanto si experimenta un estrés leve como si tiene problemas más graves, ponerse en contacto con un terapeuta o un asesor puede proporcionar información valiosa y estrategias de respuesta adaptadas a sus necesidades. Solo usted sabe cómo le afecta algo y si necesita ayuda, así que en lugar de jugar al juego de la comparación, haga lo que proteja su bienestar mental.
4. Desconéctese: Aunque las redes sociales ofrecen conectividad, el uso excesivo puede crear o aumentar sensaciones de inadecuación, ansiedad e incluso soledad. Tomar descansos de las redes sociales o desconectarse puede darle tiempo para reflexionar, reducir el estrés inducido por las comparaciones y promover la atención plena en el momento presente.
5. Tome días de salud mental: Al igual que damos prioridad a la salud física tomando días de enfermedad cuando es necesario, también debemos reconocer cuándo nuestro bienestar mental necesita atención. Tomar un día de salud mental permite descansar, reflexionar y rejuvenecer, lo que ayuda a desarrollar resiliencia y prevenir el agotamiento.
6. Vuelva al momento: Cuando los factores estresantes sean demasiado grandes, considere técnicas de conexión a tierra que puedan ayudar a redirigir el enfoque y aliviar la ansiedad. Practique la atención plena involucrando sus sentidos: nombre cinco cosas que pueda ver, oír, tocar, oler y saborear. Este sencillo ejercicio fomenta la concienciación del momento presente, estimula la relajación y reduce la bola de nieve de pensamientos abrumadores.
7. Acepte la risa y el humor: La risa es realmente la mejor medicina. Incorporar humor a su vida diaria puede aliviar el estrés, mejorar el estado de ánimo y mejorar el bienestar mental general. Ya sea viendo un espectáculo de comedia, compartiendo bromas con amigos o jugando a juegos, la risa ofrece potentes beneficios terapéuticos, como estimular la circulación y ayudar con la relajación muscular.
Incorporar estas estrategias basadas en la ciencia a su rutina puede fortalecer su salud mental y mejorar su bienestar general. Recuerde, priorizar el cuidado personal no es egoísta: es esencial para llevar una vida plena y equilibrada. ¡Este mes, comprométase a cuidar su salud mental y adoptar la resiliencia paso a paso!
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